Era una fiesta visual y olfativa. Hay una amiga del bosque que últimamente parece que se emociona mucho con mi ida:
Acá estaba en posición de defensa. Quería hacernos creer que con su cola nos iba a hacer algo. Don Mario creyó jaja. Pero bueno, es su hábitat, y yo creo que hay bastante cantidad de estas, porque ya es la cuarta vez que veo una.
Hongos tampoco faltaron. Y la naturaleza hermosa siempre presente. Tengo que admitir que después de verle a la coral me quedé con un poco de miedo. Todavía no puedo superar del todo, pero creo que tengo que trabajar en eso. Así no puedo disfrutar de la naturaleza, porque a cada paso que doy miró en cada rinconcito, bajo cada hoja, detrás de cada piedra y hasta en las ramas de los árboles. Me roza una plantita y ya grito. Tengo que poder!!
Faltan 2 colectas para terminar la etapa de campo, espero que cuando termine mi miedo también se vaya!
No hay comentarios:
Publicar un comentario