Viaje 6 - Lluvia mansa en el bosque y tereré

Qué hermoso es el bosque cuando llueve! Sé que mucha gente comparte este pensamiento conmigo. No es que me haya agarrado la lluvia en pleno bosque ahora, pero más o menos. Desde que llegamos a Luque en el viaje de ida empezó a lloviznar, y la parte en la que más fuerte estuvo la lluvia fue en la avenida de eucaliptos que está bajando el cerro de Caacupé. En serio lejos de querer plaguearme porque llovía o que me encantaba la idea de mi primera ida al bosque con la lluvia ahí. Y  la lluvia continuó mansamente hasta un poquito después que empezamos a colectar muestras ya en la propiedad. Pero por más de que haya parado la lluvia quedó todo mojado, y en serio le daba al bosque un toque casi místico si se quiere.

Lluvia mansa

Otra cosa que la lluvia posibilitó fue poder apreciar la belleza de los líquenes, ya que mojó todo y los colores que tienen se podían ver mucho mejor que cuando están secos. Hay muchísimos ahí, y crecen en cualquier parte. De repente parecen mini bosques formados sobre troncos de árboles, en los roquedales o en cualquier parte. Los líquenes fueron casi los protagonistas por ahí esta vez (hablando de fotos claro) junto con algunos honguitos y musgos. El mundo chiquitito que crece sobre los troncos de los árboles era hermoso así todo mojado después de la lluvia. 

Líquen

Hongo

No hacía ni tanto calor primero, lo que facilitó el trabajo de colectar muestras para empezar las comparaciones de semillas y demás. Después salió el sol y un calor húmedo empezó a sentirse, pero estaba todo lluvioso ya =) jaja.

Tocando la hoja de la Melastomatacea

Una cosa re importante de la que me olvidé completamente de comentar hasta el momento es mi querido e infaltable tereré! Es una rutina en cada viaje la parada en Ypakarai para comprar hielo y llenar los dos termos de hielo (en el de 4 litros para guardar para más tarde y en el de 2 para mezclar ya con el líquido vital) (Y la comida también compramos de ahí obvio) Eso sí! La yerba tiene que ser sí o sí 100% Ilex paraguariensis, nada de cosas saborizadas! Y el toque final: el remedio refrescante. Ahí ya tenemos nuestra bebida poderosa para todo el día.

Tereré! =)

Me encanta cuando nos sentamos bajo el aguaí que está cerca de la casita (que es tipo el pc hasta que se termine de construir toda la infraestructura) y tomamos el tereré bien fresquito antes y después de trabajar! Y una cosa infaltable en toda ronda de tereré: los “caso ñemombe’u”, o las anécdotas que mi papá y don Mario siempre tienen! A mí me parece re gracioso escuchar, me parece tan lejano, casi inventado! Jaja pero sé que pasó alguna vez todo eso que cuentan.. Bueno, no todo, como esa vez que les conté que don Mario empezó a hablar de su encuentro con el pombero, o el de un amigo suyo, no recuerdo bien..  pero bueno, cada quien con sus cosas..

Siempre encontrando bichitos

Hasta parece que posa..

Soy re feliz bajo el aguai.. Es tan linda la vida de campo. Es tan hermoso el bosque, en serio es culpa de la lluvia que le dejó tan lindo al bosque que esté toda embobada ahora y venga acá a escribir tipo una carta de amor al bosque! Jaja.. Pero en serio es lindo. El vientito y todo es diferente ahí. Ojalá esta investigación sirva alguna vez para de hecho saber qué camino tomar a la hora de restaurar los bosques!  Me preocupa que cada vez que voy veo más manchas en los cerros de alrededor.  Están pelando…